Esta práctica surge el primer semestre del año 2020. El equipo directivo, con el apoyo de los y las docentes y a través del análisis de evidencia, construyen un diagnóstico sobre la situación escuela, que devela la necesidad de fortalecer el vínculo y la comunicación entre docentes – estudiantes, para mejorar la asistencia y la participación en las clases. A partir de esto, el equipo directivo impulsa la incorporación de actividades que promueven el bienestar socioemocional de las y los estudiantes, en la planificación pedagógica de todos los cursos del colegio. El objetivo de esta práctica es “establecer una relación de confianza con los estudiantes a través de la comprensión de sus emociones y vivencias, para favorecer el buen clima en el aula y sus respectivos procesos de aprendizaje”. La incorporación de estas actividades, implicó tiempo de aprendizaje y formación de docentes y del equipo directivo. Lo que se llevó a cabo a través de la búsqueda de recursos y estrategias relacionadas con el bienestar socioemocional y el aprendizaje entre pares.